Concienciación sobre los Eventos Cerebrovasculares (Stroke)

Concienciación sobre los Eventos Cerebrovasculares (Stroke) APN May 6, 2025

Casi todos conocemos a alguien—un familiar, amigo o colega—que ha sufrido un infarto cerebral. Incluso figuras públicas como el Papa Francisco han sido víctimas de esta devastadora condición. Como pacientes, familiares, cuidadores y profesionales de la salud, es nuestro deber conocer más sobre esta enfermedad para mejorar su detección temprana, manejo y prevención.

Cada mes de mayo, nos unimos al esfuerzo global para crear conciencia sobre los eventos cerebrovasculares, conocidos también como “strokes”.

¿Qué es un infarto cerebral?

Un infarto cerebral, o evento cerebrovascular, ocurre cuando se ve afectado el flujo sanguíneo al cerebro. Esto puede suceder de dos formas principales:

  • Infarto isquémico (85% de los casos): Es el tipo más común. Se produce cuando una arteria se obstruye por un coágulo, impidiendo que el oxígeno y los nutrientes lleguen al tejido cerebral, lo que provoca la muerte de las neuronas.
  • Infarto hemorrágico (15% de los casos): Un vaso sanguíneo se rompe, causando sangrado, inflamación y compresión en el cerebro.


En el habla cotidiana, se le conoce como “derrame cerebral”, “ataque cerebrovascular”, “ictus” o simplemente “stroke”. Es una de las principales causas de discapacidad y está entre las primeras cinco causas de muerte a nivel mundial. Se estima que cada 40 segundos alguien sufre un infarto cerebral y cada 3 minutos, una persona muere debido a sus complicaciones.

Factores de riesgo

Entender las causas y factores de riesgo es clave para la prevención. Algunos factores no se pueden modificar—como la edad o la genética—pero muchos sí.

  • No modificables: Edad avanzada (mayores de 55 años), antecedentes familiares, raza/etnia (los hispanos tienen mayor riesgo).
  • Modificables: Presión arterial alta, obesidad, sedentarismo, diabetes, colesterol elevado, tabaquismo, fibrilación auricular, apnea del sueño, enfermedad renal crónica y consumo de drogas ilícitas.


En las últimas décadas, los “strokes” en personas jóvenes han aumentado, en gran parte por el mal control de estos factores de riesgo.

¿Cuáles son los síntomas?

Un evento cerebrovascular puede afectar estructuras vitales y altamente funcionales del cerebro, y en ocasiones menos frecuentes, los ojos o el cordón espinal. Los síntomas varían según el área afectada, pero por lo general aparecen de forma súbita.

Esté atento a los siguientes signos de alerta:

  • Debilidad o entumecimiento en un lado del cuerpo (cara, brazo o pierna)
  • Dificultad para hablar o entender lo que se dice
  • Pérdida repentina de visión en uno o ambos ojos
  • Mareo, pérdida de equilibrio o coordinación
  • Dolor de cabeza intenso sin causa aparente


Ante cualquiera de estos síntomas, actúe de inmediato. Cada minuto cuenta.

¿Qué hacer ante un posible evento cerebrovascular?

“El tiempo es cerebro”. Está ampliamente demostrado que la detección y acción temprana ante estos síntomas es clave para evitar un daño irreversible o incluso la muerte del paciente. Si identificamos alguno de estos signos, es fundamental llamar al 9-1-1 para ser trasladados a una institución hospitalaria capacitada para atender este tipo de emergencias.

Ante cualquier síntoma, llame al 9-1-1 inmediatamente. Incluso si los síntomas desaparecen en minutos, podrían ser un aviso de un infarto cerebral inminente. La intervención temprana es esencial para recibir tratamientos agudos como:

  • Trombolíticos intravenosos: Medicamentos como alteplasa o tenecteplasa (recientemente aprobada por la FDA) ayudan a disolver coágulos.
  • Trombectomía mecánica: Procedimiento endovascular para remover coágulos en casos seleccionados.


En infartos hemorrágicos, el manejo incluye controlar el sangrado y, si es necesario, intervención neuroquirúrgica.

Después del evento: seguimiento y prevención

El manejo no termina en la fase aguda. Es fundamental continuar el cuidado con un neurólogo y otros especialistas para evitar recurrencias y facilitar la rehabilitación.

Para quienes no han tenido un evento, la prevención es clave:

  • Visitar al médico al menos una o dos veces al año
  • Mantener una dieta balanceada
  • Hacer actividad física al menos 30 minutos al día, 5 veces a la semana


Invertir en nuestra salud es la mejor decisión que podemos tomar. Conocer más sobre los infartos cerebrales es el primer paso para prevenirlos.

Dr. Daniel Reyes De Jesús
Dr. Daniel M. Reyes de Jesús
Neurólogo Vascular